El fútbol es el deporte más popular en todo el mundo. El más rico, el más atractivo, el rey que reina desde hace años sobre todos los demás. No hay nadie tan fuerte como él en el planeta. Eso es un hecho, probado y comprobado, verídico y real. Como también lo es que su preponderancia insultante provoca recelos en ciertos súbditos que no quieren ser súbditos. En su derecho están.
Dentro del mundo de las artes marciales mixtas hay gente que nunca lo verá con buenos ojos. También la habrá dentro del mundo del balonmano, del atletismo, waterpolo o judo, supongo. El guapo de la clase no a todos caía bien, las chicas solo le miraban a él.
El caso es que si seguís desde hace un tiempo este BLOG nunca habréis leído nada que vaya contra el fútbol, por tres razones.
Primera, porque hasta los 18 años es el deporte que más practiqué con muchísima diferencia (aunque escasa fortuna).
Segunda, porque profesionalmente como periodista/redactor este deporte me ha enseñado mucho y, si no pasa nada, seguirá enseñándome.
Y tercera y MÁS IMPORTANTE, porque para que crezcan las MMA en España necesitamos ‘robar’ aficionados del fútbol, o mejor dicho, tomar prestados.
¿De dónde han salido los aficionados a las MMA en los Estados Unidos? De los cuatro grandes deportes allí: baloncesto, béisbol, fútbol americano y hockey. El próximo UFC227 se celebrará en Los Ángeles. ¿Acaso no puedes ser aficionado de los Lakers o Clippers e ir a ver a TJ Dillashaw defender su cinturón ante Garbrandt?
En España, esos cuatro deportes -quitando el baloncesto- no tienen ninguna relevancia, por lo que el gran caladero donde pescar nuevos fans está en el fútbol, ni más ni menos. Por eso, es conveniente tenerlo de aliado. Si es el más guapo y las chicas le miran principalmente a él, felicidades. Cuanto más cerca estemos, mejor, ¿no?
PD: Diría que unos ‘tales’ McGregor y Nurmagomedov ya lo saben esto.
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